viernes, 31 de octubre de 2008

Relámpago

Faltan 5 días para que el mundo se pudra.
Tiene una aguja reloj golpeando agudo cada segundo, otro segundo, otro.
Los más viejos lo sabían pero esperaban una muerte menos mierda que la vida.
De pronto.
Relámpago.
Rosa sale a la puerta y era el telefono. Atiende, lo sabía: eran problemas. Los disfrutó, los hizo suyos, luego los disfrazó y guardo en el subsuelo de la cabeza, justo antes de olvidarlos.
Pensó desesperadamente en llegar.
Pero el éxito está más abajo que el fondo,
y los que ansian ganar nunca compiten.